Las plántulas fuertes son la clave para una cosecha generosa. Por lo tanto, es muy importante elegir un suelo de alta calidad que proporcione al brote en desarrollo los nutrientes necesarios.
Duracion
Lo primero a lo que hay que prestar atención es la vida útil del suelo. Mire cuidadosamente la fecha de producción de la mezcla para macetas y asegúrese de que no esté vencida.
El hecho es que, en la mayoría de los casos, la turba es la base del suelo de la tienda. Durante el almacenamiento a largo plazo, las partículas de turba se desintegran gradualmente en elementos separados y el proceso en sí se acompaña de una reacción térmica. Esto puede afectar negativamente a las plantas.
Composición
La composición detallada de la mezcla debe indicarse en el paquete. No se deje engañar por el bajo costo si el paquete contiene solo la inscripción: "Suelo para plántulas" y una imagen brillante.
Cuanto más detallada sea la composición, mejor. La base de cualquier mezcla de suelo es la turba. Su contenido alcanza el 75 por ciento. Puede ser caballo o tierra baja. El primero tiene un tinte rojizo característico, el segundo es marrón oscuro, casi negro.
Si es posible, prefiera la mezcla de turba de tierras bajas. Dado que el caballo tiene una alta acidez, lo que tiene un efecto negativo en la germinación de las semillas.
Además, la descomposición de la turba de los páramos altos en componentes disponibles para las plantas es extremadamente lenta, por lo que dicho suelo será bastante pobre para las plántulas.
Además de la turba, cualquier mezcla contiene arena de río o perlita como polvo de hornear, así como tierra común, estiércol o compost en un pequeño porcentaje.
Además, los fabricantes agregan componentes que compensan la acidez de la turba: harina de piedra caliza o dolomita, cal apagada o ceniza de madera.
Además, la composición puede contener macronutrientes útiles y varios fertilizantes orgánicos. Cuantos más aditivos se utilicen, mayor será el costo del suelo.
La presencia de tres macronutrientes.
Al elegir un suelo, preste atención a la presencia de macronutrientes como nitrógeno, potasio y fósforo. La correcta formación de los brotes vegetales depende de su contenido.
Es cierto que los fabricantes no siempre indican exactamente cuántos nutrientes contiene la mezcla. Esto significa que existe la posibilidad de obtener un suelo en el que los macronutrientes sean escasos o en exceso.
Compra "en prueba"
Si no está seguro de la calidad del fabricante, compre un paquete pequeño de tierra para evaluar usted mismo sus propiedades. La mezcla debe tener un color marrón oscuro, una textura quebradiza y fibrosa, un olor tranquilo y no repulsivo.
Compruebe si los componentes sueltos son visibles en él y cuál es su cantidad en la masa total. La mezcla no debe presentar grumos sólidos, larvas, esporas ni residuos vegetales secos.
Intente exprimir la tierra en su mano y hacer un pequeño bulto. Si lo logró fácilmente, lo más probable es que la mezcla esté empapada. Si inmediatamente se desmorona en polvo en sus manos, entonces no hay suficiente humedad.
Extienda una pequeña cantidad de tierra, alise con una capa fina y espere un par de días. Si comienzan a aparecer manchas blancas, parecidas a la sal o focos de moho en la superficie, se debe descartar dicha adquisición.
También puede analizar la acidez del suelo comprado.Para hacer esto, basta con usar pruebas de tornasol que se venden en una tienda de jardinería. Puedes ver cómo usarlos en Internet. Habiendo evaluado su compra de esta manera, puede estar seguro de la calidad del suelo comprado.