Tarde o temprano, los cultivadores de flores se enfrentan a problemas asociados con el deterioro de la salud y el valor decorativo de las plantas de interior. Una apariencia deprimida, hojas letárgicas o amarillas, caída de brotes, todo esto indica un cuidado inadecuado de ellos. Para que las flores caseras comiencen a "disfrutar de la vida" nuevamente, debe comprender las razones de esta afección y eliminarlas con urgencia.
Si las hojas se marchitan
Con un riego insuficiente, las hojas primero se marchitan, luego se secan y luego toda la planta muere.
Como resultado del riego frecuente y el exceso de humedad, el sustrato se acidifica, las raíces se pudren por falta de oxígeno, como resultado de lo cual la actividad vital de la planta se interrumpe y se manifiesta por el primer signo: el marchitamiento de las hojas.
La razón de esto puede ser el estancamiento de agua en la maceta con mal drenaje (altura de capa insuficiente o material inadecuado para ello). Independientemente del sustrato que se utilice, es indispensable un buen drenaje, que es responsable de la permeabilidad del suelo al agua y al aire, la distribución eficaz y la salida del agua.
Si hojas y tallos podridos
Algunas plantas prefieren un riego abundante, mientras que otras, por el contrario, prefieren una humedad del suelo más moderada. Pero en diferentes épocas del año, no puede ser igual.
Desde aproximadamente noviembre, la mayoría de las plantas de interior entran en un período de inactividad. Por lo tanto, en invierno, el riego se reduce significativamente en comparación con el período de verano; una humedad moderada es suficiente para ellos. Con humedad excesiva, una planta sana adquiere un color inusual, las hojas se tiñen y los tallos en la base comienzan a pudrirse.
En el verano, las razones de esto deben buscarse en diversas enfermedades:
- Podredumbre gris (botrytis): parece una flor blanquecina y esponjosa en las hojas, que posteriormente se vuelve blanda por las manifestaciones de podredumbre. Así que las begonias y las violetas a menudo se enferman de botrytis, cuando sus hermosas hojas comienzan a pudrirse por el exceso de humedad, especialmente en el frío invierno.
- Podredumbre marrón: aparece en las hojas con manchas de color marrón rojizo, que con el tiempo aumentan activamente de tamaño. En este caso, la planta se seca y muere con mayor frecuencia.
Si la planta arroja cogollos
La causa más común de caída de los cogollos es un riego inadecuado o una humedad insuficiente en la atmósfera circundante. Hay varios otros factores que causan este fenómeno:
- El aire interior es demasiado seco. Para aumentar la humedad, se rocía aire alrededor de la planta. En este caso, la entrada de humedad en los brotes y las flores es inaceptable.
- Suelo demasiado seco en una maceta debido a largos descansos entre riegos o, por el contrario, demasiado húmedo. Es necesario ajustar el modo de riego según el tipo de flor de interior.
- La iluminación insuficiente ralentiza el proceso de fotosíntesis en las hojas, como resultado de lo cual, la flor de interior arroja sus capullos. Algunas plantas, como la rosa doméstica, dejan de florecer por completo.
- La presencia de plagas en la planta. Si aparecen insectos dañinos: pulgones, cochinillas, cochinillas, entonces surgen problemas con toda la parte aérea de la planta. No solo los cogollos se marchitan y caen, sino que las flores y las hojas también comienzan a ponerse amarillas, hay una caída total.
Si las hojas son pálidas
Las hojas pequeñas y pálidas indican que en un corto período de tiempo la planta ha dado un fuerte salto en el crecimiento, los brotes se alargan y el follaje aún no ha logrado alcanzarlos. Este fenómeno ocurre en invierno o principios de primavera, cuando el apartamento está demasiado cálido, el suelo está lo suficientemente húmedo y, por el contrario, no hay suficiente iluminación.
Es mejor eliminar los brotes demasiado debilitados. Y si tales signos aparecen durante el período de crecimiento activo, entonces la planta necesita alimentación adicional y buena iluminación.
Si las hojas son amarillas
El marchitamiento de la planta no debe confundirse con el proceso natural, que es el amarillamiento y desprendimiento parcial de las hojas. Para la mayoría de las plantas de interior, la auto-eliminación del follaje viejo es parte del ciclo de desarrollo normal. Tales plantas incluyen begonia, caladium, ciclamen, anredera, es decir, aquellas que tienen un período de inactividad completo. Además, la muda parcial se considera normal para las camelias, coleria, jazmín y fucsias.
Si las hojas se vuelven amarillas en otras especies de plantas, entonces la causa puede ser una corriente de aire, bajadas de temperatura o luz solar directa. Las flores de interior no toleran las corrientes de aire frío. No están adaptados al movimiento constante de masas de aire. Si la planta se encuentra debajo de un acondicionador de aire o cerca de una ventana con la que se ventila la habitación, debe trasladarse a otro lugar.
Los cambios constantes de temperatura también provocan follaje amarillo. Es necesario trasladar la flor a un lugar protegido de las subidas de temperatura. El problema tardará mucho en desaparecer.
Los abrasadores rayos del sol pueden dañar la planta y provocar quemaduras. Aparecen manchas amarillas en las hojas. Para rectificar la situación, basta con trasladar la flor a otro lugar.
Si la planta tiene manchas marrones secas
A veces aparecen manchas marrones secas en la planta. Este daño puede ser causado por las siguientes razones:
- La flor está en una habitación con una temperatura excesivamente alta. Es necesario reducirlo o trasladarlo a un lugar más fresco.
- Falta de humedad. En este caso, debe comenzar a observar el régimen de riego que es necesario para una planta en particular.
- Fertilización excesiva. Para resolver el problema, es necesario trasplantar la flor a un nuevo sustrato. Solo se debe usar la cantidad recomendada de fertilizante, así como la composición correcta.
- La aparición de manchas marrones puede deberse a la falta de luz. Por este motivo, el proceso de fotosíntesis en la planta se ralentiza, por lo que los cogollos pierden su capacidad de florecer. Es necesario transferir la flor al alféizar de la ventana sur o proporcionar iluminación artificial.