Los cultivadores de flores experimentados llevan mucho tiempo utilizando fósforos comunes como ayudantes en el cuidado de las plantas. Los minerales incendiarios contienen algunos de los elementos esenciales para las flores. Sus propiedades resuelven muchos problemas y son muy económicas.
Protegiendo el suelo de enfermedades
De 10 a 20 partidos pegados uniformemente con la cabeza gacha ayudará a prevenir la propagación de patógenos. Esta medida es especialmente eficaz ante los primeros signos de enfermedad de las plantas, así como durante el período de floración, cuando no es deseable rociar con fungicidas. El azufre de la mezcla incendiaria se disuelve gradualmente e inhibe el crecimiento de esporas y bacterias.
Mejora el feto
Además de azufre, el fósforo contiene compuestos de fósforo, zinc, potasio. Estos oligoelementos nutren además las flores y tienen un efecto positivo en las plantas frutales:
- mejorar las características del sabor aumentando el contenido de fructosa;
- prevenir la formación de compuestos de nitrato;
- Acelera los procesos metabólicos y la maduración.
Estimular el crecimiento
Los productos químicos del cabezal de encendido se convierten en fertilizante con un efecto gradual. Las sales disueltas tienen un efecto positivo en el crecimiento general de la planta. El fósforo, como componente esencial e insustituible, participa en:
- fotosíntesis;
- la formación del sistema radicular y la mejora de la función de absorción;
- forma parte del ADN y el ARN;
- participa en la regulación de la respiración de las plantas.
El zinc es necesario para la formación de la hormona del crecimiento: auxina, así como clorofila; participa en la síntesis de proteínas y el metabolismo de los carbohidratos.
Mayor duración de la floración
Las plantas de interior tienen un suministro limitado de nutrientes, que se reponen periódicamente con fertilizantes minerales complejos. Contienen un pequeño porcentaje de oligoelementos que se consumen muy rápidamente.
Si se usa una mezcla incendiaria de fósforos como fuente adicional de compuestos importantes, entonces el efecto se verá no solo en el crecimiento, sino también en una floración larga e intensa. La formación acelerada de fitohormonas contribuye a la colocación del número máximo de brotes, el color de los pétalos será más brillante.
Protección parasitaria
Las plantas de interior son susceptibles a las plagas en la misma medida que las plantas de jardín. Esto se ve facilitado por:
- riego excesivo;
- uso excesivo de materia orgánica;
- suelo contaminado.
Las larvas y los mosquitos, que se asientan en la flor y se multiplican rápidamente, son especialmente peligrosos. A los primeros signos de la aparición de insectos parásitos, los fósforos comunes acudirán al rescate, lo que lo salvará del uso de un insecticida.
Tus acciones:
- 5-10 fósforos se pegan en un círculo con la cabeza hacia abajo, retrocediendo desde el borde de 3-5 cm;
- la flor se riega un poco menos de lo habitual para que el suelo seco acelere la recuperación;
- después de 3 días, los fósforos se reemplazan por otros nuevos.
Esto continúa hasta la completa desaparición de las plagas.
Los fósforos pueden saturar el suelo con elementos útiles, que a menudo escasean en una planta. El fósforo y el azufre son indispensables para la inmunidad, el crecimiento y la floración normales. No use demasiados fósforos, de lo contrario, una sobreabundancia de componentes causará intoxicación y quemará las raíces.